La fractura de cadera en el anciano son las más frecuentes y son las que van a plantear un conjunto de problemas que en gran medida están condicionadas por estas edades avanzadas, salvo raras excepciones , todas ellas tiene que operarse si se quieren lograr los resultados más efectivos.
Perfil del anciano con fractura de cadera
Las fracturas de cadera en el anciano son más frecuentes en las mujeres debido a la pérdida de cantidad de hueso (osteoporosis), la frecuencia cambia según la relación con los distintos países, siendo la incidencia más alta en los países del norte de Europa y USA y en menor incidencia en los países del mediterráneo seguramente determinante por la radiación solar que es más fuerte en estos países, también parece ser que en las zonas rurales donde sus habitantes están más expuestos a las radiaciones solares esta incidencia es menor.
El perfil del anciano con riesgo de fractura de cadera corresponde más a una mujer blanca , mayor de 70 años, delgada y vida sedentaria que padece enfermedades crónicas, con antecedentes familiares con osteoporosis, fumadora o bebedora.
Prevención de las fracturas de cadera en el anciano
La prevención de las facturas de cadera es un tema fundamental sanitario en los distintos países, ya que producen una elevada morbilidad y mortalidad en el anciano y tiene repercusiones económicas importantes.
El principal objetivo es intentar ser más eficaz contra la osteoporosis aplicando medidas que prevengan su aparición, con una alimentación equilibrada y dieta rica en proteínas y vitamina D, calcio con dosis suficientes, todo esto interviene positivamente para frenar la pérdida de masa ósea, así como mantener una actividad física diaria.
Fractura de cadera en el anciano su manejo
Cuando un anciano sufre una caída y se rompe la cadera va a sentir dolor intenso en la región inguinal, si la fractura es completa no va a poder levantarse del suelo ni mover el miembro lesionado y si la fractura es incompleta, el anciano podría moverse pero tendría el riesgo de llegar a ser una fractura completa.
Ante esta situación las personas que están a su cuidado pondrán al paciente en la situación más cómoda y no tratarán de levantarle ni trasladarle si no disponen de los medios y personal competente. Se le trasladará a urgencias y se le realizará un estudio radiológico y ante todo esto harán una valoración total del estado general y se tomará la decisión quirúrgica, informando a los familiares de el tratamiento de la fractura de cadera en el anciano
La cirugía es la opción básica del tratamiento de la fractura de cadera, la técnica más común es la extirpación de la cabeza femoral, colocando una endoprótesis, con ésta el paciente recuperará la funcionalidad e incluso podrá caminar en la primera semana.
La estancia del anciano con fractura de cadera en el hospital puede prolongarse hasta 2 semanas, los cuidados postoperatorios son fundamentales y de ellos depende la recuperación, así como los cambios posturales son importantes para evitar las úlceras de decúbito.
Para que todas estas medidas sean eficaces es imprescindible la colaboración de personal médico, enfermeros , auxiliares y familiares.
Podemos decir que en los últimos tiempos las fracturas de cadera en el anciano ha dejado de ser nefasto y devastador para los pacientes, ya que hay un mejor manejo de pacientes, una mayor atención y métodos quirúrgicos más avanzados con los cuales es posible una rápida recuperación del anciano a su vida habitual.