CALIDAD DE VIDA. Ponemos todos los medios para que los mayores disfruten de las máximas comodidades y tengan las mínimas molestias en su vida cotidiana. Una atención permanente, un trato cálido, una buena alimentación y un entorno agradable son básicos para conseguirlo.
RESPETO y COMPRENSIÓN. Respeto por nuestros mayores, por sus dolencias, por sus costumbres, por su sabiduría y experiencia.
Comprensión con sus achaques, sus manías y sus cambios de humor, más aún si están agravados por su deterioro físico o cognitivo. Nuestros padres y madres, abuelos y abuelas, se merecen todo el cariño y el apoyo que podamos prestarles, porque sin ellos no existiríamos.